Con espíritu de unidad

Todo estaba previsto para una despedida y una recepción del nuevo año a todas luces, pero una serie de factores se conjuraron para que la promesa se llevara a cabo sólo a medias. Mucha gente se dio cita en el Paseo del Bicentenario después de la medianoche para vivir de cerca y comunitariamente
la fiesta de fuegos artificiales que todos los años el gobierno municipal propone. Pero  las inclemencias climáticas y algunos imprevistos técnicos, provocaron dificultades con el sonido y la proyección de un video generado para el acontecimiento. A esto habrá que sumar que la empresa responsable de
los fuegos de artificio no llevó a cabo lo pactado y el esperado momento fue más corto de lo que estaba previsto.

Una noche de fraternidad y espíritu de festejo que sólo pudo reflejarse a medias pero que de ningún modo empañó la voluntad y el deseo de compartir y aguardar el 2013 de manera  colectiva.