Con muchas pruebas y proezas que fueron de menor a mayor logró que los chicos lo fueran guiando durante todo el show que duró casi una hora y en donde no faltó el fuego, la minibicicleta y las piruetas.
Entre bromas buscó dejar distintos mensajes a los más pequeños que fueron acmpañados por sus familias como por ejemplo no jugar con fuego, el respeto o el valor por las pequeñas cosas que nos da la vida.